La mente y la biblia parte II

Como Cuidar nuestra Mente
Cuidando el jardín de la mente: Un oasis de paz y sabiduría en la Biblia
La mente humana, esa fascinante herramienta que nos permite pensar, sentir y soñar, es un jardín que requiere cuidado y atención constante. En la Biblia, encontramos una guía invaluable para cultivar un oasis de paz y sabiduría en medio de las tormentas de la vida. A través de sus versículos, Dios nos enseña cómo nutrir nuestra mente, protegerla de las influencias negativas y fortalecerla para que florezca en todo su potencial.

Consejos bíblicos para cuidar la mente:
Alimentar la mente con la Palabra de Dios:

1. Proverbios 4:23 nos instruye:

"Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana la vida". La Palabra de Dios, como un alimento nutritivo, fortalece la mente y nos guía hacia el camino correcto.
Salmo 119:105 declara: "Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino".

Renovar la mente mediante la meditación:

2. Romanos 12:2 nos invita a "no conformarse a este siglo, sino transformarse por medio de la renovación de su mente". La meditación en la Palabra nos permite renovar nuestros pensamientos, adoptando una perspectiva alineada con la voluntad de Dios.

3. Salmo 1:2 describe a la persona que medita en la ley del Señor como un árbol plantado junto a corrientes de agua, que da fruto a su tiempo.

Cultivar pensamientos positivos:

4. Filipenses 4:8 nos anima a enfocarnos en "todo lo que es verdadero, honesto, justo, puro, amable, de buen nombre, si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza". Cultivar pensamientos positivos transforma nuestra mente en un jardín lleno de flores, atrayendo paz y bienestar.
Proverbios 15:15 nos recuerda que "el corazón alegre vive en abundancia".

Proteger la mente de las influencias negativas:

5. Efesios 4:22-23 nos exhorta a "despojarnos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, y a renovarnos en el espíritu de vuestra mente, y a vestirnos del nuevo hombre, creado según Dios en justicia y santidad verdadera". Proteger la mente de influencias negativas, como la violencia, la pornografía o el lenguaje inapropiado, es esencial para mantener un jardín saludable.

6. Proverbios 13:20 nos advierte que "el que anda con sabios será sabio; mas el que anda con necios sufrirá daño".

Ejercitar la mente con actividades edificantes:

7. 1Corintios 9:25 nos recuerda que "Y todos corren, pero uno solo recibe el premio. Corran de tal manera que lo obtengan". Ejercitar la mente con actividades como la lectura, el estudio o la música nos ayuda a mantenerla activa y fortalecer sus capacidades.

8 Proverbios 18:15 nos dice que "el corazón del entendido adquiere conocimiento, y los oídos de los sabios buscan saber".

Buscar ayuda cuando sea necesario:
9. Proverbios 15:14 nos asegura que "el corazón del entendido busca conocimiento, mas la boca de los necios se alimenta de necedad". Si sentimos que nuestra mente está abrumada o luchando con problemas, no debemos dudar en buscar ayuda profesional o el consejo de un líder espiritual. Además en  Santiago 5:14 nos invita a "llamar a los ancianos de la iglesia para que oren por él y lo unjan con aceite en el nombre del Señor".

10. Deuteronomio 6:7 "Y las enseñarás a tus hijos, hablándoles de ellas cuando te sientes en tu casa, cuando andes por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes".

11.Josué 1:8 "Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas todo lo que en él está escrito; porque entonces tendrás buen éxito en tu camino, y todo te irá bien".

Renovar la mente mediante la meditación:

12. Isaías 26:3 "En ti confío, oh Jehová; no seré avergonzado; No me hagan triunfar mis enemigos".
12. Habacuc 2:2 "Y escribió Jehová sobre la pared: Mira, el altanero, su alma no es recta en él; Mas el justo por su fe vivirá".

La mente, como un jardín fértil, requiere cuidado constante para florecer y dar frutos de sabiduría, paz y bienestar. Al seguir los consejos de la Biblia, podemos cultivar un oasis en medio de las dificultades, transformando nuestra mente en un reflejo de la gloria de Dios.

No te olvides:

1. Alimenta tu mente con la Palabra de Dios.
2. Renueva tu mente mediante la meditación.
3. Cultiva pensamientos positivos.
4. Protege tu mente de las influencias negativas.
5. **Ejercita tu mente con actividades edificantes.